celo en perras

Es muy importante conocer cómo funciona el ciclo sexual de nuestras mascotas, para evitar embarazos indeseados y demás problemas hormonalmente dependientes. Vamos a tratar sobre el celo en perras.

Las perras tienen dos ciclos al año aproximadamente, es decir cada seis meses, pero este dato puede variar dependiendo de la raza, edad y del propio individuo, por lo que el intervalo entre celos podría oscilar entre los 5 y los 11 meses. Habría perras que podrían tener solamente un celo al año.

Fases de celo en perras

Durante el celo hay cuatro fases:

  • Proestro: en esta primera fase del celo en perras veremos la vulva de nuestra perrita más grande de lo normal, y le acompañará un sangrado, mayor o menor, dependiendo de cada una. A veces algunas perras  se asean tanto la zona que ni siquiera nos daremos cuenta. Existen braguitas para perras que evitan que manchen la casa. Esta fase durará de 9 a 12-15 días, y veremos que la perra no acepta macho, es decir, no se dejará montar cuando los perros vayan a olerla. Solamente los dos o tres últimos días del sangrado empezará a estar más receptiva e incluso puede que se deje montar.
  • Estro: esta fase se caracteriza porque la vulva continúa inflamada pero la perra ya no sangrará. En cambio, estará muy receptiva a los machos y la pueden preñar. Los dos últimos días de sangrado y tres o cuatro primeros que el animal ya no sangra es el momento de máxima fertilidad, así que mucho cuidado, son muy rápidos y una vez estén los perros enganchados, no tirar de ellos, podéis desgarrar la vagina a la hembra y es muy doloroso. Esperáis a que suelten y acudís al veterinario, ya que hay abortivos que se pueden aplicar sin ninguna alteración secundaria. Esta fase dura de 12 a 16 días, dependiendo de la perra.
  • Diestro: esta fase tiene una duración de dos meses, la perra ya no querrá al macho y su vulva estará de nuevo en estado normal. Aparentemente no muestran nada significativo, pero hormonalmente es una fase muy importante. Por un lado, hay que explicar que las perras, independientemente de si han quedado gestantes o no,  tienen las mismas hormonas, es decir, ellas sienten que sí están embarazadas. Por eso durante estos dos meses podremos observar los llamados “embarazos psicológicos” o pseudogestaciones, donde la perra mostrará un comportamiento maternal muy significativo, incluso con subida de leche en mamas. Por supuesto si sucediera esto hay que tratarla en el veterinario.Durante esta fase también es frecuente la aparición de infecciones de útero, muy peligrosas, por lo que si observamos decaimiento, fiebre, mayor ingesta de agua y por lo tanto mayor producción de orina, anorexia y demás, hay que acudir inmediatamente al hospital, ya que se trata de un problema grave que la mayoría de veces requiere incluso la entrada al quirófano del animal.Si la perra hubiera quedado gestante recomendamos realizar un seguimiento ecográfico y radiológico durante los dos meses y hasta el momento del parto para garantizar que todo salga bien.
  • Anoestro: es la etapa que separa  un celo de otro y, como hemos comentado al principio, la duración es indeterminada, siendo ésta de 3 a 7 meses, aproximadamente, dependiendo de la perra. Esta fase se caracteriza porque el organismo no tiene ningún tipo de actividad hormonal, por lo que es el momento adecuado para esterilizar a la perra.Esterilizando, eliminamos todos los problemas descritos en este artículo del blog.

Por último, recalcar que en las perras no existe la menopausia; es decir, son activas hormonalmente hasta que mueren, pero conforme se hacen mayores los ciclos son más irregulares y pueden aparecer problemas. Por ello es muy  importante realizar un chequeo geriátrico anual a partir de los 7 años de vida, para que no se pase por alto ninguna patología tumoral o similar y poder instaurar un tratamiento lo más rápido posible.

Además, respecto al celo en perras recomendamos apuntar en una libreta  los celos de nuestra perrita para poder descartar problemas de este tipo cuando nos lo pregunte el veterinario en una visita.

Por supuesto, os animamos a esterilizar a vuestras mascotas a partir del primer celo para garantizarles salud y
bienestar de por vida.