A la hora de introducir un nuevo gato en casa si ya hay uno previamente que ha estado viviendo solo un tiempo, no es fácil que lo acepte con normalidad, por lo que es muy importante seguir unas pautas desde el principio para una buena convivencia futura.
Los gatos son muy territoriales, además por naturaleza organizan y dividen su espacio en zonas, la de comida, de aseo, de descanso y juego. Como en la vida libre, no les gusta que otro gato entre y avasalle su terreno, por ello hay tantas peleas entre gatos callejeros.
Cuando introducimos un nuevo gato en casa, tendemos a pensar que no va a haber ningún problema y que se llevarán bien, que lo aceptará, pero no siempre es así. Normalmente nos encontramos con todo lo contrario, un rechazo absoluto por parte del gato veterano.
Pautas a seguir para integrar un nuevo gato en casa
Por lo tanto en un principio limitaremos dos espacios, una habitación para el gato nuevo y el resto de la casa conforme la teníamos con el anterior. Por lo tanto en un principio no entrecruzarán sus caminos y vivirán separados. Unos días después empezaremos a dejar que se vean a través de una puerta de cristal, un transportín o alguna barrera. Además iremos intercambiando cosas entre ellos, por ejemplo los platos de comida, juguetes… para que vayan reconociendo olores y lo vayan relacionando positivamente.
A la semana empezaremos a dejarlos sueltos en una zona neutra de la casa, nunca en el “territorio del gato veterano” para que interactúen, lo normal es que se bufen, NUNCA hay que reñir al gato mayor o antiguo, porque entonces aceptará peor aún la situación y no aceptará al nuevo.
Poco a poco le iremos dando espacio al gatito nuevo, les dejaremos más tiempo juntos, y poco a poco lo normal será, si seguimos estas pautas, que se acaben aceptando. Muchas veces no llegarán a hacerse amigos, simplemente se respetarán y tolerarán, es normal, no podemos pedir más. Otros con suerte acabarán durmiendo juntitos, jugando… lo cual será un gozo para nosotros.
La importancia de evitar el estrés
De igual manera lo más importante es evitar el estrés, así que continuaremos con la misma rutina de siempre, juegos, alimentación… para que el cambio sea siempre como algo positivo, como una situación mucho mejor. Recordemos que los gatos aprenden asociando, por lo que si un gato nuevo significa más juegos y más atención, lo aceptarán mucho mejor que. Si de golpe lo ignoramos, se sentirá rechazado, frustrado y eso empeorará las cosas.
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