En infinidad de ocasiones nos preguntamos si los perros pueden pensar, si son listos, si nos entienden, si recuerdan cosas… Pues bien, en este artículo intentaremos aclarar todas esas dudas y además aportar información muy interesante sobre nuestros maravillosos amigos de cuatro patas.
Para empezar: ¿Qué es la inteligencia?: Según la RAE es la capacidad de entender o comprender y la capacidad de resolver problemas.
La inteligencia en los perros
Stanley Coren, profesor de psicología, publicó en 1994 el libro “The Intelligence of dogs”, publicado en español con el título “La fabulosa inteligencia de los perros”. El libro explica el grado de inteligencia por el que se diferencian las distintas razas y para ello define tres tipos de inteligencia en el perro:
- Inteligencia instintiva: se refiere a la habilidad del perro para llevar a cabo las tareas para las que se cría.
- Inteligencia adaptativa: se refiere a la habilidad del perro para aprender y resolver problemas por sí mismo.
- Inteligencia en trabajo y obediencia: se refiere a la habilidad del perro para aprender de los seres humanos.
El Dr. Stanley Coren publica en su libro una tabla donde determina la inteligencia de cada raza canina organizándolas por grupos, en función de la inteligencia funcional, la obediencia, la capacidad de recordar y la velocidad de la respuesta. Por lo tanto y resumiendo:
Entre el grupo del 1 al 10 se encontrarían las razas Border Collie (el más inteligente) seguido del Caniche, el Pastor Alemán, el Golden Retriever, Dobermann, Papillón y Rotweiller.
Entre el grupo del 11 al 26 se encuentran el Schnauzer Miniatura, el Pointer alemán de pelo corto, el Cocker Spaniel, el Spaniel bretón, el Braco de Weimaraner, el Pastor Belga y el Pomerania.
Entre el grupo del 27 al 39 se encontraría el Yorkshire Terrier, el Samoyedo, el Pinscher miniatura, el American Staffordshire Terrier, el Setter Ingles y el Dálmata.
Entre el grupo del 40 al 54 estarían el Fox Terrier, el Cavalier King Charles Spaniel, el Husky Siberiano, el West Highland White Terrier, el Boxer, el Dogo Alemán, el Teckel, el Fox Terrier y el Akita Inu.
Entre el grupo del 55 al 69 estarían el Carlino, el Bulldog Francés, el Bichón Maltes, el San Bernardo, el Bullterrier, el Chihuahua, el Lhasa Apso, el Bullmastiff y el Crestado Chino.
Del grupo 70 al 79 encontraríamos el Shih Tzu, el Basset Hound, el Beagle, el Pequinés, el Bulldog Inglés y el Chow Chow.
¿Cómo piensan los perros?
Con ello llegamos a la conclusión de que los perros sí son inteligentes pero, ¿cómo actúa su cerebro?, ¿cómo piensan los perros?:
Por un lado los canes recuerdan información de determinadas situaciones y comportamientos a través de la repetición y de la asociación a estímulos agradables o desagradables para ellos y los almacenan en su cerebro, utilizando para ello la memoria, pero ¿Qué es la memoria?
Según la Real Academia Española, la memoria es la facultad psíquica por medio de la cual se retiene y recuerda el pasado, y el perro también posee esa capacidad de almacenamiento de información en su cerebro. Ellos guardan los recuerdos tanto positivos como negativos y los utilizan cuando se enfrenta a una situación parecida. Es decir ellos basan su aprendizaje en la asociación de conceptos.
Por otro lado, los perros tienen la capacidad de estudiar las caras de las personas, por ello son capaces de copiarnos e imitarnos y de comprender nuestras expresiones, ya sean de enfado o de alegría, algo que muy pocos animales consiguen y que es fundamental en el aprendizaje social. Además muestran empatía hacia las personas, apoyándonos cuando estamos tristes, intentan animarnos, se relajan cuando nos mostramos relajados y les contagiamos hasta el bostezo.
Según el investigador canino Stanley Coren, los perros pueden distinguir más de 160 palabras. Además, son capaces de resolver problemas complejos, con unas habilidades mentales próximas a la de un niño de 2 años de edad. Además tienen la capacidad de contar hasta cuatro o hasta cinco, y poseen conceptos básicos de aritmética que les permite detectar errores en sumas sencillas como 1+1=3.
Por lo tanto hay que estimular el cerebro de los perros, ya que a ellos les encanta aprender. Existen numerosos juegos en el mercado donde tu mejor amigo se entretendrá a la par que se sentirá útil y realizado.
Además la enseñanza de trucos y ordenes básicas también será un estimulo importante para tu perro y además os ayudará a controlarle en determinadas ocasiones.
La mayoría de los conflictos que tenemos con nuestras mascotas tienen como base un problema de aburrimiento, frustración o falta de estímulos, acude a nuestro hospital, te ampliaremos la información y te daremos herramientas para ponerle solución, haciéndoos más felices a ti y a tu mejor amigo.