El ciclo sexual de las gatas es muy diferente al de las perras, es de tipo poliéstrico estacional, es decir, los celos se repiten de forma continua durante la estación apropiada. Estos ciclos sexuales dependen de la temperatura y la luz solar, o lo que es lo mismo, del fotoperiodo. Por ello las gatas suelen empezar el celo sobre primavera y continuarlo hasta que finaliza el verano debido a que los días se van alargando y la temperatura va aumentando.
Otoño e invierno debería ser un periodo de inactividad sexual, pero muchas gatas que viven en casa alargan su ciclo por la influencia de la luz artificial o la calefacción.
Cómo manifiestan el celo las gatas
Las gatas manifiestan el celo con ronroneo, frotación con personas y objetos, maullidos constantes, están más nerviosas y levantan el rabo. Muchas veces estos síntomas se acentúan por la noche. Esta fase es conocida como proestro, pero no es tan claramente diferenciable como en la perra y se enlaza con el estro. Recalcar que las gatas no sangran en ningún momento de su ciclo sexual.
En esta fase del ciclo sexual de las gatas, éstas dependen de la monta de un macho para poder ovular, esto es el fenómeno llamado como ovulación inducida. Para ello el pene del macho presenta la particularidad de tener unas formaciones duras en forma de pequeñas espinas en su superficie, que tienen la finalidad de estimular el genital de la hembra durante la cópula e inducir la ovulación.
¿Qué pasa cuando una gata está en celo?
-No hay macho que la monte o hay monta pero no capaz de producir ovulación, la gata entra en un periodo llamado interestro que dura desde tres días a dos o tres semanas, tras el cual volverá a aparecer el celo y así sucesivamente.
-La monta un macho y se produce la ovulación, la gata entrará en fase de diestro que dura aproximadamente dos meses, donde la gata puede estar gestante o no (Si no lo está podrá producirse la famosa pseudogestación o también llamado embarazo psicológico).
Por lo tanto, debido al tipo de ciclo sexual de las gatas y la manera de manifestarlo, la necesidad absoluta que tienen durante el celo de que las monte un gato y el peligro que tiene que se escapen de casa buscando machos, aconsejamos la esterilización de vuestras mascotas, ya que recordamos que siempre va a conllevar un bien para ellas, en salud física y mental, además de tranquilidad.