el juego en perros y gatos

A continuación exponemos unas cuantas ideas para jugar con nuestra mascota y proporcionarle un rato de diversión. El juego en perros y gatos es fundamental para el desarrollo y bienestar de nuestros animales de compañía.

El juego en los perros

Los canes son animales sociables, por lo que el  juego debe formar parte de su día a día. Con solo 3 semanas de edad ya empiezan a mostrar la conducta con sus congéneres y después lo harán con nosotros los humanos.

Gracias al juego, los cachorros aprenden a gestionar sus emociones, principalmente el estrés, realizan ejercicio, resuelven conflictos, controlan la mordida y fortalecen el vínculo con nosotros, entre muchas otras cosas.

El perro utiliza su boca para explorar el mundo, igual que lo hace un bebé con sus manos, por eso muerden y cogen todo lo que está a su alcance y utilizan ésta para jugar. De adultos, jugar hará que se sientan más seguros y confiados, les ayudará a liberar tensiones, aumentará su estimulación mental evitando frustraciones, será más sociable con los de su especie y creará un precioso vínculo con su familia humana. Podemos clasificarlos de la siguiente manera:

  • Juegos entre canes: perseguirse, correr, revolcarse, “pelear”, saltar… forma parte del ritual de juego entre los perros. Va a ser una actividad sana y saludable siempre y cuando se respeten los límites y ninguno de ellos se sobrepase.
  • Juegos de estimulación mental: los perros piensan, claro que sí, no de la misma manera que nosotros, pero asocian conceptos de una forma espectacular. Por lo tanto necesitan trabajar esa cabeza con retos y pequeños problemas que al resolverlos les producirá una gran satisfacción, ya que hoy en día muchos de ellos pasan el día en casa sin poco que hacer, por lo que hay una elevada probabilidad de padecer frustración, estrés y ansiedad. Estos juegos son los llamados de inteligencia y constan de puzles donde se esconden premios y han de tener la habilidad de obtenerlos (abriendo cajones, moviendo piezas, etc.) Debemos estar presentes cuando los tengan a su disposición.

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  • Juegos de estimulación olfativa: el olfato es esencial para nuestro peludo, gracias a él interactúa con el medio. Por él pueden reconocer amigos, encontrar presas, alimentarse… el potenciarlo es fundamental para su bienestar. Para ello existen artículos como la “alfombra olfativa” con diferentes texturas para esconder premios, la cual les encanta, pero también se puede hacer de forma casera escondiendo comida por la casa bajo diferentes objetos para que rastreen y se entretengan un rato, desarrollando positivamente esta habilidad tan canina.
  • Juegos individuales: si le damos una pelota a nuestro mejor amigo, jugará con ella unos minutos, pero luego se cansará si no estamos con él. Por ello existen un tipo de juguetes masticables en los que se puede introducir comida para que se entretengan sin necesidad de compañía. Estos serían por ejemplo el Kong, el asta de ciervo o los huesos con sabor, con los que pasarán un estimulante rato intentando terminar con ellos.
  • Juegos con el propietario: nosotros formamos parte de la manada de nuestro amigo peludo, por lo tanto es fundamental interactuar con él. Jugar hace que se sienta feliz y complacido y crea un vínculo emocional Podemos tirarles una pelota o el frisbee y enseñarles a que nos lo devuelvan, también jugar a estirar una cuerda, siempre y cuando el perro no muestre una conducta agresiva, o también forma parte del juego el enseñar a que cumplan unas órdenes (sentarse, tumbarse, hacerse el muerto…) y luego desarrollarlas más activamente en un circuito de agility.

juego en perros y gatos

El juego en los gatos

Los felinos también contemplan el juego como parte de su rutina diaria. Los gatos invierten un 80 por ciento del tiempo en descansar y acicalarse, pero el 20 por ciento restante en cazar y jugar.

Los gatos juegan prácticamente desde que nacen, esto les ayuda a interactuar con el medio, a socializar con sus congéneres, controlar la mordida y los arañazos, aprender a mantener un estado de alerta de sus cinco sentidos, disminuir el estrés y la ansiedad y realizar ejercicio. Lo ideal es que el gato juegue una media de 20 minutos al día para satisfacer sus necesidades básicas y prefieren hacerlo en horas crepusculares, en las cuales se encuentran mucho más activos. Podemos diferenciarlos de la siguiente forma:

  • Juegos que simulan la caza: muchos gatos viven dentro de casa y tienen limitado el acceso al exterior de la vivienda, por ello no pueden desarrollar su instinto de caza. Para evitar frustraciones debemos facilitarles juguetes que ayuden a estimular esta conducta:
  1. Peluches en movimiento: pequeños ratoncillos con pilas que se mueven por la casa harán que nuestro amigo se entretenga persiguiéndolos.
  2. Caña de pescar: es uno de los juegos preferidos de los gatos. Normalmente los humanos somos los que dirigimos ese juego de persecución y ataque, pero existen en el mercado cañas que se mueven por estimulación solar o incluso que funcionan con pilas para momentos que no dispongamos de tiempo suficiente.
  3. Láser: también les encanta perseguir la luz por toda la estancia, pero importante saber que al finalizar este juego debemos poner un trozo de comida en el último haz de luz para que el gato comprenda que ha podido cazar al fin aquello que estaba persiguiendo, si no pueden confundirse y frustrarse.

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  • Juegos con bolas: el movimiento de los juguetes les encanta, por lo que las pelotitas pequeñas compradas o hechas con papel de aluminio o incluso los tapones de las botellas serán un gran entretenimiento para tu mascota. Otra idea es construir una caja de cartón con agujeros y meter dentro bolitas para que el gato intente cogerlas desde fuera con sus patitas.
  • Juegos interactivos: al igual que los perros, los gatos también piensan y necesitan estimular su cerebro con actividades fuera de su rutina. Para ello también están los juguetes interactivos, donde el peludo se las ingeniará para obtener la comida escondida en diferentes elementos, ya sea empujando con la boca o la patita…
  • Juegos de olfato: a los felinos también les gusta utilizar la nariz, así es que tenemos que proporcionarles juegos con comida. Esconderla por la casa o meterla dentro de un juguete, que con sus habilidades podrá finalmente obtener, es una idea perfecta para hacer feliz al gatito. El juguete llamado Pipolino es una muy buena alternativa para ellos, además podremos racionar su comida y evitar la ansiedad y la obesidad.
  • Juegos entre gatos: este tipo de juego no es tan común como en canes adultos, de hecho, cuando son pequeños, los gatos sí suelen jugar mucho con sus congéneres y si éstos continúan formando parte de la familia en el futuro también lo harán. En cambio, entre dos gatos adultos desconocidos no es tan habitual esta conducta, debido al instinto de territorialidad que existe entre ellos. Algunos, al tiempo, acaban convirtiéndose en amigos y comparten juegos, pero muchos otros sólo lo harán con su familia humana.
  • Juegos con el rascador: a los gatos les encanta estar en las alturas, subirse a los árboles, vigilar el entorno, rascar… por ello es imprescindible que tengan un buen rascador en casa y, si es posible, que esté situado cerca de una ventana (cerrada si no se tienen mosquiteras) para que puedan observar el exterior (son animales muy curiosos). Esto les entretendrá, les hará sentirse cómodos y les ayudará a descansar mejor. Un buen rascador ha de ser firme y estable y lo suficientemente alto para que el gato pueda rascarlo de pie.

juego en perros y gatos

He aquí unas ideas sobre el juego en perros y gatos para dar ratitos de felicidad y diversión a nuestro mejor amigo, ayudándole así a su bienestar físico y emocional. Sea como fuere lo más importante es demostrarles amor y dedicarles todo el tiempo que tengamos disponible, al fin y al cabo nos necesitan, ellos solo nos tienen a nosotros en su día a día.